Uno de los mayores atractivos del barrio de Palermo son los impresionantes Bosques de Palermo, un enorme bosque, parque en plena ciudad de Buenos Aires.
Hipódromo Argentino: reconstruido en 1908 de estilo francés Belle Epoque, pero no nos dejaron ni sacar la cámara, así que no hubo foto para la posteridad. Luego había salas de juego muy oscuras, sobre todo porque eran las 11h. de la mañana con un sol radiante. Entramos… entramos y salimos, nunca habíamos visto un casino pero no nos gustó mucho, mejor pasear por el solecito.
Jardín Japonés: Uno de los rincones más bellos de Buenos Aires. Está muy cuidado y todo él rebosa simbolismo, serenidad y equilibrio. También puedes realizar el ancestral ritual de la comida en su restaurante japonés, el sushi está delicioso. Serenidad en el Jardín Japonés. Allí se encuentra la Campana de la Paz, campanas similares están diseminadas por el mundo y un día y una hora especial suenan a la vez para pedir por la paz mundial.
Jardín zoológico. El zoológico de Buenos Aires. Es muy bonito, cada recinto tiene un edificio de las características del país de origen del animal.
Monumento de los Españoles: Fue un regalo que la comunidad española de Buenos Aires hizo a la ciudad. Está en Palermo Viejo, cerca del Jardín Japonés… aunque aquí no hay nada cerca, simplemente todo es graaande.
Barrio de Palermo • Buenos Aires • Argentina