Cabo Norte. Nordkapp

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El Cabo Norte 70º10’21» es el punto más septentrional de Europa al que se puede llegar por carretera. Está en la isla de Magerøya, con un acantilado de 307 metros de altura y una gran meseta plana en la cima donde se ha colocado una esfera del mundo. Aquí se puede disfrutar de una vista maravillosa del sol de medianoche, del mar de Barents, de los acantilados, de los frailecillos y otras aves y sentir que has llegado «cas» al fin del mundo… y a un lugar mágico.

El sol de medianoche puede verse desde el 14 de mayo hasta el 31 de julio en el Cabo Norte. Nosotros llegamos a Honningsvag en barco y recorrimos en autobús unos 30 kilómetros hasta Cabo Norte. Como disponemos de muy poco tiempo, tuvimos que contratar una excursión. Lo hicimos con shore2shore.es que teníamos buenas referencias de ellos, y además resultaba más barata que la del Crucero.

El lugar es muy mágico y a pesar de la decepción de no ver absolutamente nada, nos gustó estás allí y sentir que casi habíamos llegado al «fin del mundo». En realidad el punto más septentrional es un cabo cercano llamado Knivskjelodden, pero no hay carretera hasta allí, solo se puede llegar a él haciendo senderismo, unos 9km. Y también antes de llegar al Polo Norte está el archipiélago de Svalbard. Así que podemos decir que el Cabo Norte es el lugar más septentrional de Europa accesible por carretera, y no del continente porque está en una isla… pero sigue siendo mágico.

En las instalaciones del lugar también hay un Museo donde te cuentan historias, un cine con un documental del lugar y la recreación de los pajaritos que se encuentran en la zona, y una gran tienda donde puedes comprar aún más souvenirs, cafetería, restaurante, oficina de correos para enviar postales desde un lugar tan especial… y hasta una pequeña capilla donde pueden rezar todas las religiones. Todo ello en un complejo subterráneo inmenso de 5.000 m².

Historias de Cabo Norte

Exploradores de Cabo Norte

El explorador inglés Richard Chancellor rodeó el Cabo Norte en 1553 buscando una ruta para llegar a Asia a través del océano Ártico, aunque la encontró con Rusia. Un verano de 1664, un franciscano italiano, Francesco Neri llegó a Cabo Norte, se encontró con un acantilado de 307 metros que escaló hasta llegar a su cima, la explanada donde ahora está la esfera del mundo. A Francesco se le considera el primer turista de Cabo Norte.

El rey Oscar II de la unión Noruega-Suecia visitó Cabo Norte el 2 de julio de 1873. En aquella época, para llegar a Cabo Norte, el rey y su séquito tuvieron que desembarcar en Hornvika, a un kilómetro al sureste del cabo. Luego tuvieron que subir por su cuenta el empinado sendero. Cuando llegaron arriba brindaron con champagne, tradición que ha quedado hasta nuestros días. Ya tenemos otra razón más para volver… brindar con champagne acompañado con caviar ártico.

Ésta era la única forma de llegar a Cabo Norte hasta que se abrió la carretera en 1956. Para muchos turistas fue una experiencia insólita y agotadora. Aquí el rey descubrió un monumento de granito que todavía se puede ver.

El Rey Rama V de la Dinastía Chakri tailandés, también viajó a Cabo Norte

Somdetch Phra Paramindr Maha Chulalongkorn (Rey Rama V de la Dinastía Chakri) nació el 20 de septiembre de 1853, hijo del Rey Mongkut y la Reina Debsirindra. El joven príncipe Chulalongkorn fue educado en el Palacio Real por tutores privados tailandeses y occidentales para prepararle para su futuro cargo. Fue coronado Rey de Siam a la edad de 15 años, el 1 de octubre de 1868.

El visionario rey Chulalongkorn fue el primer monarca tailandés que viajó fuera del reino en tiempos de paz. A principios de su reinado, visitó los países vecinos de Siam, como Singapur, Java, Birmania y la India para conocer de primera mano los sistemas de administración de las colonias occidentales. Durante sus viajes, conoció las reformas necesarias para modernizar su país. Los viajes también sirvieron para mejorar las relaciones diplomáticas con esos países. En medio de la creciente tensión del colonialismo europeo en el Sudeste Asiático, el rey Chulalongkorn realizó su primer gran viaje a Europa en 1897 para reunirse con las cabezas coronadas y los líderes europeos. La visita sentó las bases para una nueva era en las relaciones siamés-europeas, que tuvo como resultado la preservación de la soberanía del Reino de Siam.

En 1907, el rey realizó una segunda gran gira, aunque semi-oficial, a ocho países europeos, entre ellos Noruega. S.M. el Rey Chulalongkorn fue el primer rey del Sudeste Asiático en viajar por el continente hasta Europa.

El reinado de Chulalongkorn fue una época de reformas. El Estado red ferroviaria estatal, infraestructuras de servicios públicos y un sistema de telecomunicaciones para modernizar Siam. Puso en marcha educación y sanidad públicas en beneficio de los plebeyos siameses. Una de las contribuciones reales más importantes fue el anuncio de la Ley de Abolición de Esclavos, que fue un claro gesto de la gran compasión del rey por su pueblo.

El rey Chulalongkorn falleció el 23 de octubre de 1910 de una enfermedad renal a la edad de 57 años. Es uno de los monarcas más queridos y venerados de Tailandia. El rey Chulalongkorn fue nombrado póstumamente «Somdetch Phra Piya Maharaj» o el «Amado Gran Rey».

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Niños de la Tierra

En 1988 se puso en marcha un proyecto único en Cabo Norte. Siete niños de distintas partes del mundo fueron seleccionados al azar por el autor Simon Flea Devold y trasladados en avión a Cabo Norte. Cada uno de ellos hizo un relieve de arcilla que, en 1989, se amplió, se fundió en bronce y se colocó en semicírculo en el exterior de la sala de Cabo Norte.

Los siete niños eran Jasmine de Tanzania, Rafael de Brasil, Ayumi de Japón, Sithidei de Tailandia, Gloria de Italia, Anton de Rusia y Louise de Estados Unidos. El objetivo del proyecto era demostrar que los niños pueden entenderse, trabajar juntos y divertirse juntos independientemente del color de la piel, la religión y el origen cultural.

Una hermosa estatua, «Madre e hijo», realizada por la artista Eva Rybakken, se colocó junto a los relieves de bronce para dar al monumento su armoniosa forma final.

Desde 1989, el monumento y el Salón del Cabo Norte son el escenario de la entrega anual del Premio de los Niños de la Tierra. El premio consiste en una importante suma de dinero concedida a una persona, una organización o un proyecto que trabaje para promover las condiciones de vida, la calidad de vida, los derechos y la salud de los niños. Los Niños de la Tierra simbolizan la cooperación, la amistad, la esperanza y la felicidad más allá de todas las fronteras. Esperamos que el monumento siga en pie durante mil años.

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