Egipto

Os contamos la experiencia de nuestro viaje a Egipto, un lugar lleno de contrastes, desde la grandiosidad faraónica al caos endémico. Durante unos meses nos hemos preparado viendo documentales, estudiando la religión egipcia, leyendo de todo para poder vivirlo intensamente… pero nada es comparable a la realidad. 

Este es un breve resumen de nuestro viaje de 8 días en Egipto, 4 noches de crucero y 3 en El Cairo para aclararnos de todo los hemos visto. Luego, de las cosas más importantes escribiremos algún artículo más amplio. Hemos elegido pasar la Nochevieja en Egipto y el tiempo ha sido fantástico.

Nuestro guía Wafek, organizó muy bien las visitas, los transportes, solventó cualquier problema que pudiera surgir… incluso en El Cairo, el autobús nos dejaba siempre delante de la puerta de los sitios para que no tuviéramos que cruzar las caóticas calles de esta ciudad donde… no hay autoescuelas. Cada guía llama de una forma a su grupo, Wafek nos llamaba habibis (queridos) y realmente se formó un buen grupo de habibis alegre y divertido.

Día 26: Salida hacia Luxor

Presentación en el aeropuerto dos horas antes de la salida del vuelo con destino Luxor. Llegada a Luxor, donde serán asistidos por nuestro personal de aeropuerto para recogida de maletas y Traslado a la motonave, embarque y cena a bordo. Esto queda muy bonito sobre el papel.

Las 4 horas de vuelo pasaron rápidas con ilusión, lectura de Egipto y un pequeño tentempié. El caos llegó nada más llegar al aeropuerto, te tienes que buscar en unas listas y empiezan a decirte en qué autobús tienes que ir, te suben a uno, te bajan, nadie parece conocer tu destino, no entiendes lo que dicen entre ellos, parece una venta de pescado… nos vamos uniendo por grupos y hablando, descubres que vamos a la misma motonave, aunque, extraño, luego no todos subimos al mismo autobús, aunque sí llegamos al mismo barco… es el caos típico de Egipto que ya no nos abandonará.

Hice una foto al bajar del avión a las 21h. y otra al llegar al camarote, a la cena que nos esperaba y pasaron 2 horas de caos y risas.



Día 27: Valle de los Reyes, Hatshepsut, Memnon, Templo de Luxor…

Antes de las 5h. de la madrugada ya estamos desayunando en el barco. Primero vamos al Valle de los Reyes para llegar los primeros y verlo más o menos tranquilos. Visitamos 3 tumbas, no las eliges, el gobierno decide cuales se abren cada día, así hay un poco de rotación. Y de las tumbas más famosas se compra la entrada aparte, como la Tumba de Tutankamon o la Tumba de Nefertari en el Valle de las Reinas, cuya entrada está sobre los 80€, aunque si hubiéramos tenido la oportunidad, la hubiera pagado.

Nosotros visitamos la tumba de Ramses IX KV6, la tumba de Merenptah KV8 y la tumba de Ramses III KV11. Son nuestras primeras tumbas, así que la emoción se sentía a flor de piel. Recorrimos ansiosos cada dibujo de la pared tratando de identificar una diosa aquí, un dios allá, admirando ese mágico cielo estrellado sobre nuestras cabezas, esas paredes donde no cabe ya nada más, bajando por las rampas de madera hasta el lugar del sarcófago… realmente mágico y emocionante.

Tumba de Ramses IX
Tumba de Merenptah
Tumba de Ramses III

A las 7:15h. ya estamos en el Templo funerario de la reina-faraón Hatshepsut, está dedicado a Amón, rey de los dioses y Ra, dios del sol. Tenía altares dedicados a Anubis, dios de la muerte. En la zona sudeste del templo, hay una capilla de Hathor, diosa de la fertilidad con columnas con capiteles hathóricos. Está en Deir El Bahari, enfrente de la orilla donde están los templos de Karnak y Luxor. La reina Hatshepsut, es hija de Tutmosis I y gobernó Egipto a lo largo de 20 años durante la dinastía XVIII (1490-1469 aC).  Es un templo especial y bellísimo excavado en la montaña, con tres aterrazamientos unidos por una gran rampa que se llenaba de gente en las ceremonias.

La salida de todos los templos y lugares turísticos, se suele hacer por un túnel con tiendas a ambos lados, donde te insisten tanto en comprar que ni siquiera quieres mirar lo que llevan. Si no agobiaran tanto y pudieras mirar libremente, seguramente hubiera comprado algo. Y además repiten continuamente «no agobio, no agobio».

Después nos llevan a otra de las típicas encerronas para comprar en una supuesta fábrica de objetos de alabastro, aunque seguramente vienen de China… pero en España muchas cosas vienen de China y nos parece normal. Compramos un bonito escarabajo con jeroglífico inventado, seguramente bastante más caro de su valor, pero ya sabes a lo que vas. Además, sigue siendo barato y todos tienen que ganar.

A las 9h. llegamos a ver los Colosos de Memnon, ya teníamos ganas de verlos… dos gigantescas estatuas del faraón Amenofis III, quien gobernó durante la dinastía XVIII de Egipto. Está sentado, sus manos reposan en las rodillas y su mirada se dirige hacia el este, en dirección al río Nilo y al Sol naciente. Dos figuras de menor tamaño, situadas junto al trono, representan a su esposa Tiy (como nuestra motonave, Tiyi), y a su madre Mutemuia; los paneles laterales muestran una alegoría del dios de la inundación anual, Hapy.

A las 11:30h. llegamos al Templo de Karnak que está unido por la avenida de las Esfinges con el Templo de Luxor. Tebas fue capital del imperio durante 1.500 años. El Templo de Karnak está dedicado al dios Amón y fue embellecido durante más de dos mil años por los sucesivos faraones que compitieron por dejar una huella más impresionante que sus antecesores.

A las 13h. llegamos al Templo de Luxor. Fue concebido como un complemento del otro gran templo de la ciudad de Tebas, el de Karnak, y su construcción fue impulsada principalmente por los faraones Amenhothep III y Ramsés II. Un enorme obelisco de 25 metros nos sorprende a la entrada. Su gemelo está en la Plaza de la Concordia de París.

Una mañana muy intensa desde que amanecimos en el Valle de los Reyes. De todos los lugares que visitamos pondremos una Entrada especial. Vuelta a la motonave, almuerzo a bordo y navegación hasta Edfu pasando por la exclusa de Esna. Noche a bordo en Edfu.



Día 28: Templo de Edfu y Templo de Kom Ombo

Son las 5:30h. de la mañana y en la hora azul previa al amanecer, las barcas de pescadores lanzan sus redes al Nilo.Crucero por el Nilo

En esta serenidad absoluta, vemos como el dios Khepri con forma de escarabajo impulsa el disco solar hacia un nuevo y radiante amanecer en el río Nilo, el río que da la prosperidad y la vida a la tierra negra de Egipto. Egipto era llamado Kemet «tierra negra» que en realidad es el limo que depositaba el río en sus crecidas.

Pronto aparecen los incansables vendedores jugándose la vida, atando sus frágiles barquichuelas a la motonave para empezar a vender sus mercancías. El cansino mantra «hola, hola amigo… hola» echa por tierra la magia del momento.
Calesas: Edfu: Egipto Más tarde, nos han llevado en calesa hasta el templo de Édfu. Hubiéramos preferido cualquier otro transporte no animal, porque se exprime a los pobres caballos hasta la extenuación, mira el caballito de la foto. Lo de conducir por aquí es algo difícil de describir con palabras… si es que se le puede llamar conducción.

El Templo de Edfú El Templo de Edfú está dedicado al dios Horus con su forma de halcón y es el mejor conservado de la época grecorromana. Lo realizó la dinastía de los Ptolomeos muy tardíamente entre los años 237 y 57 a. C. y lo sabemos porque las fechas están escritas en las paredes. Tras la implantación del cristianismo en el imperio romano, el templo fue abandonado cuando se prohibió el culto pagano el año 391 d. C. La arena del desierto lo enterró e incluso se edificaron viviendas sobre esas arenas.

Tumbas y cruceros por el NiloVolvemos al barco y disfrutaremos de la navegación hasta Kom Ombo. El Nilo sigue regalándonos sus contrastes, entre tumbas y cruceros de placer, aparece otra vez el Ra, el dios sol, pero esta vez toma el nombre de Atum. «Al amanecer me llamo Khepri, al mediodía Ra y al atardecer Atum».

Al amanecer me llamo Khepri, al mediodía Ra y al atardecer Atum Al principio todo era agua, era Nun, el océano infinito. No había vida ni muerte. El espíritu del mundo se hallaba disperso en un caos inmenso, hasta que, tomando conciencia se llamó a sí mismo; así nació el dios Ra el dios del Sol. Ra estaba solo; así que decidió crear de su aliento a Shu (el viento), y de su saliva según la mitología creó a Tefnut (la humedad), y les ordenó que viviesen al otro extremo del Nun. Después Ra hizo emerger un espacio seco donde pudiese descansar; a aquel espacio seco le llamó tierra, y a la Tierra que emergió le llamó Egipto. Y como surgió de las aguas, viviría gracias a éstas; así que hizo que las aguas estuviesen en la Tierra; así nació el Río Nilo.

Llegamos a Kom Ombo y visitamos ya de noche el templo, cerca de las orillas del Nilo. Al igual que el Templo de Horus en Edfu, este también lo construyeron entre los años 180 y 47 a. C. los Ptolomeos, macedonios descendientes de amigos y oficiales de Alejandro Magno. El Templo de Kom Ombo es muy original ya que se trata de un templo dual, dedicado a dos divinidades, Sobek, con cabeza de cocodrilo y Haroris, Horus el viejo. Por este motivo todas sus estancias, patios, salas y santuarios están duplicados… hasta hay dos entradas diferentes. Vimos también un Nilómetro muy bonito y un pequeño museo de cocodrilos.

Volvimos al barco para navegar hasta Aswan. Dentro de un rato, sonará el despertador a la 1: 30h de la mañana.



Día 29: Visitas a Aswan: Abu Simbel, poblado Nubio, Aswan…

Pues no era una errata, el despertador sonó a la 1:30h de la madrugada, nos dieron una bolsita con picnic y con almohada y todo, nos subimos al autobús. En determinado punto del camino organizaron un convoy de más de 100 autobuses, pero estuvimos parados casi una hora y llegamos a Abu Simbel a las 6:54h., levemente tarde para ver el amanecer sobre el Lago Nasser. Aunque hemos sido de los primeros, siempre hay mucha gente delante, y detrás aún más que vendrán.

Vamos a visitar el Templo de Ramses II dedicados al dios Amon Ra y el Templo de Nefertari, dedicado a la diosa Hathor, diosa de la alegría, de la maternidad, y del amor. Terminada la visita, 4 horas más de regreso al barco en Aswan.

Por la tarde, sobre las 14h. comenzamos un bonito paseo en faluca disfrutando de los paisajes, rodeando la Isla Elefantina, el jardín botánico y el mausoleo del jefe de la secta Sheita Ismailita, Agha Jan.

Así transcurría serenamente el paseo hasta que a nuestras espaldas surgieron niños en tablas de surf que se acercaban a la barca para cantar la Macarena y pedir su propina… Llegamos sin mayor incidencias hasta una playita bien bonita donde muchos compañeros, valientes habibis se bañaron en las frías aguas del Nilo un 29 de diciembre.

Acto seguido desembarcamos en uno de los poblados nubios que se suelen visitar, nos dieron un paseo en motocarros hasta arriba del poblado donde había una vista impresionante e imperdible del Nilo… luego fuimos a tomar té, probar queso, fumar una cachimba los que quisieron y coger un cocodrilo de respetable tamaño, también los que quisieron.

Nuestro día comenzó temprano, pero aún no acaba. Toca paseo por Aswan donde básicamente nos llevaron a una tienda de especias que es la que se visita siempre, puesta con muchísimo gusto, muchas salas acondicionadas para los diferentes grupos de turistas, y tras las palabras envolventes del comerciante, creo que caímos irremediablemente la mayoría de nosotros y salimos con bastantes bolsas de especias y 60€ menos 😂

Llegamos al barco donde aún nos quedaba después de la cena, la fiesta con danza de los 7 velos interpretada por un corpulento y fuerte danzarín con 7 pesadas faldas de las que iba desprendiéndose sin dejar de girar.

Más tarde salió una bailarina oriental… y luego todos… y así… 20 horas después de habernos levantado… caímos muertos y momificados en la cama.



Día 30: Visita al Templo de Philae y avión a El Cairo

Desayuno a las 6h. de la madrugada y desembarque para visitar el Templo de Philae dedicado a la diosa Isis… cuenta la leyenda que cuando Osiris fue descuartizado por su hermano Seth, su esposa Isis se refugió en la isla de Philae para reconstruir el cuerpo de su marido. También se puede ver aquí el Quiosco de Trajano, el Templo de Hathor

A las 10h. nos han llevado a una tienda de perfumes, pero los astros no debían estar en conjunción y nadie hemos comprado nada.

Comida a bordo de la motonave y traslado al aeropuerto para salir en vuelo con destino El Cairo… el vuelo se retrasó más de 3 horas, menos mal que estábamos bastantes habibis juntos porque la espera en el aeropuerto fue bastante desesperante.

Llegada y traslado al hotel… a las 00:45h. pedimos algo de cenar en el hotel después de sentir que habíamos perdido unas horas preciosas de viaje desde las 9:30h. de la mañana que terminamos la visita de Philae. Día casi perdido.



Día 31: Visita Pirámides de Guiza, esfinge… Saqqara

A las 7h. desayuno… por fin vamos a ver las Pirámides de Guiza. A las 8:30h. ya estábamos contemplando esta maravilla impresionante que aunque las hayas visto mil veces en los documentales, la sensación es diferente, grandiosa y… faraónica. Los que quisieron, entraron en el interior de la pirámide (pondremos vídeo) y otros pasearon contemplando estas bellezas milenarias. La Pirámide de Keops, única maravilla del mundo antiguo que sigue en pie, Kefren y Mikerinos.

Y luego fuimos a saludar a la enigmática Gran Esfinge de Guiza, el guardián, que fue esculpida en un montículo de roca caliza en el mismo sitio donde está. Tiene una altura de unos 20 metros aproximadamente y 73 metros de longitud. La cabeza podría representar al faraón Kefrén, teniendo el cuerpo la forma de un león con la cola recogido por el lado derecho. En épocas antiguas estaba pintada en vivos colores: rojo el cuerpo y la cara, y el nemes que cubría la cabeza con rayas amarillas y azules.​

Ahora toca otra de la visitas típicas concertadas a una tienda de papiros, nada baratos por cierto. Por lo que he visto en otros blogs y vídeos, creo que casi todos los paquetes de viajes paran en las mismas grandes tiendas, de especias, de perfumes, de papiros, de alabastro… así que no les interesa ni regatear.

También visitamos el Coloso de Ramsés II de Menfis, una escultura gigante de 12 metros de altura tallada en el Imperio Nuevo de Egipto. Ramsés II, tercer faraón de la dinastía XIX de Egipto, que gobernó unos 66 años y es uno de los faraones más célebres, debido a la gran cantidad de vestigios que perduran de su activo reinado.

Ahora nos encaminamos a Saqqara a unos 15 km al sur de la necrópolis de Guiza, frente a la ciudad de Memphis. Veremos la Pirámide de Teti, la Tumba de kagemni, la Pirámide escalonada de Zoser y los propileos (la entrada de un templo) con unas 40 columnas y numerosas pequeñas capillas…
Pasadas las 4h. de la tarde, nos llevaron a comer un rico pollo a la parrilla, varios hummus… que desde las 7h. de la mañana ya tocaba. Hay unos 30 km. hasta El Cairo y tenemos que volver pronto porque esta noche es Fin de Año y hay que descansar después de todas las excursiones… peeero… no habíamos previsto que el tráfico en El Cairo es imposible y con los atascos, llegamos al hotel cubiertos de las arenas del desierto de la cabeza a los pies con menos de una hora para prepararnos para la cena de Nochevieja.

La Cena de Nochevieja fue impresionante a todos los niveles, la comida y su presentación, la danza del vientre, el grupo de baile y sobre todo… un espectáculo alrededor de la piscina, de llamaradas de fuegos a ritmo de la música… emoción a tope para recibir el nuevo año.



Día 1: Visita y día completo en El Cairo

La Mezquita de AlabastroLa Mezquita de AlabastroSon las 7h. de la mañana del primer día de un año que comenzamos ilusionados, y hoy toca visita de la ciudad de El Cairo. Nuestra primera parada es la parte más alta de la Ciudadela de Saladino donde está situada la Mezquita de Alabastro de la primera mitad del siglo XIX. Antes de la finalización de la mezquita, las planchas de alabastro que embellecían la parte superior de la fachada fueron retirados para ser utilizados en el palacio de Abbás I.

Barrio Copto con la Iglesia de San Sergio, lugar que sirvió de refugio a la Sagrada Familia durante su paso por Egipto, construida en el siglo XI pero sus pilares centrales datan del siglo IV o V.

Barrio Copto con la Iglesia de San SergioLa verdad es que hubiéramos preferido pasear más por las callejuelas del barrio copto que entrar a ver el supuesto refugio de la virgen María. Los coptos son los egipcios cristianos, la mayor comunidad cristiana de Oriente Medio.

Museo de Arte Faraónico de El Cairo… sí, está un poco antiguo, no es tan bonito como el Museo Cívico de Bolonia y su magnífica colección egipcia, no hay planos por zonas y todas esas cosas de los museos modernos, aunque este tiene un encanto especial… y unas piezas maravillosas.

Es de esos museos para quedarse por la noche solos, seguro que sale el Ka de las piezas a pasear y pasan cosas extrañas, aunque mejor… solos no. Una de mis piezas favoritas, el faraón Khafre protegido por el dios Horus, representado como un halcón, posado en su nuca. Volveremos a Egipto cuando abran el Gran Museo Egipcio (GEM), que será impresionante.

Khan al Khalili, el mercado más famoso de EgiptoVisita al barrio de Khan al Khalili, el mercado más famoso de Egipto. La verdad es que con tanta prisa en todas las visitas y tanto vendedor invasivo, no hemos comprado casi nada y voy buscando un sistro todo el viaje, el instrumento preferido de la diosa Hathor… se sabe que existían por lo menos desde el año 3.000 a.C. En la mitología egipcia, Ihy, hijo de Hathor&Horus, era el dios de la música. Su nombre significa el «tocador de sistro» y su música alegraba el corazón de los dioses.

Khan al Khalili, el mercado más famoso de EgiptoNo te lo vas a creer, pero después de varias horas paseando por el mercado, a la hora en que ya debíamos volver al autobús, encontré mi sistro en la última tienda que vimos… y posiblemente sea el sistro más bonito del mundo.

Regresamos en taxi al hotel, donde comimos en la pizzería en la zona de la piscina dentro del propio hotel y a hacer la maleta que esto se acaba.



Día 2: Salida desde Cairo / Llegada a España

Desayuno a las 6:30h., madrugando hasta el final, y traslado al aeropuerto. Últimas fotos con los habibis que volamos juntos de vuelta a nuestra ciudad… y se acabó esta magnífica e intensa experiencia en Egipto, una civilización milenaria que esperamos conocer un poco más en otro viaje… más despacio.

Mapa de la ruta del viaje a Egipto