Hanoi

Nuestras primeras impresiones en Hanoi

Un coche nos esperaba en el aeropuerto para llevarnos al hotel Chalcedony, que está en la parte vieja de la ciudad. Contrasta la pulcritud de sus instalaciones y de su amable personal, con esa parte antigua de la ciudad donde la gente vive y trabaja en la calle.

Salimos a pasear, y aprovechamos para comprar una tarjeta SIM local de internet. Nos cuesta 8 € y nos da 30 GB al día de datos durante 30 días.

Llegamos hasta el lago Hoan Kiem donde se encuentra la pagoda del pilar único, aunque mañana la visitaremos. El paseo se hace muy incomodo porque las estrechas aceras están llenas de motos aparcadas, gente cocinando, o lavando verduras en grandes barreños, fregando los platos también en barreños, mesitas y sillitas de niño que ponen a las puertas de los lugares de comida donde la gente se sienta a tomar una cerveza o una sopa. También hay pequeñas parrillas de carbon donde asan pinchitos que huelen de maravilla y son para llevar o tomártelos allí mismo. Bicicletas de venta ambulante de frutas, ponen el colorido a la calle y sus insistentes vendedoras te cogen de la mano para que compres su producto. Así que con tanta vida en las aceras, tienes que caminar entre el bordillo roto y el trafico de motos de la carretera, agregando un punto de “aventura y supervivencia” a un paseo normal.

Antes de llegar al lago, hemos visitado un mercado de comida Châu Long Market que tenía bastante mala pinta y los charcos de agua olían realmente mal.

De allí nos hemos acercado hasta Hô Trúc Bach una especie de canal de agua donde hay unos cafés con encanto. En realidad es parte del lago del Este donde mañana veremos el templo de Buda con la torre.

Para cenar hemos elegido un sencillo restaurante donde hacen pescado guisado con verduras y luego le añades algunos ingredientes más como fideos, picante, sopa… hay seis chicos muy jóvenes que solo saben vietnamita y apenas un par de mesas llenas en el local. La comida está muy rica y lleva unas verduritas (enredadera de agua) como las que hemos visto lavar en grandes barreños en la calle. El mercado tenía unos productos no muy apetecibles, no sé si el restaurante se surtía de allí, pero lo cierto es que el plato estaba delicioso.

Toca irnos a dormir temprano porque llevamos casi 30 horas de viaje sin apenas dormir, salvo alguna cabezadita en el avión.

Breve historia de Hanoi

«En el séptimo mes del primer año de su reinado (1.010), el emperador Ly Thai To, movió la capital desde Hoa Lu a Thanh. Cuando llegó a la nueva ciudad, él vio en un sueño un dragón de oro que se levantaba en el aire; por lo tanto, él cambió el nombre de su capital futura por el de Thang Long (dragón ascendente). Hoy se llama Hanoi.

Puesto que Ly Thai To era un ferviente budista, durante ese tiempo los bonzos gozaron de muchos privilegios durante su reinado. Por ejemplo, en 1.018, los fondos públicos fueron utilizados para la fabricación de sus campanas. Más adelante, él envió una embajada a China para buscar los libros budistas de rezos auténticos.

Ly Thai To gobernó durante diecinueve años y murió en el año 1.028 a la edad de cincuenta y cinco años.»

Texto extraído de esta web

Hanoi es la capital más antigua del sudeste asiático pues, como se ve en el texto anterior, se fundó en el siglo XI. En Thang Long residió la corte real vietnamita desde el siglo XI hasta el año 1.802 cuando el emperador Gia Long, fundador de la dinastía Nguyen, trasladaría la capital a Huê. Thang Long quedó como rebajada al estatus de otra capital de provincia y en 1.831 pasó a llamarse Ha Noi que viene a significar algo así como «entre los recodos del río».

Desde 1.902 hasta 1.953 volvió otra vez a la categoría de capital de un gran territorio, esta vez bajo el dominio francés, quienes organizaron Indochina en cinco regiones históricas, Tonkín, Annan, Cochinchina, Laos y Camboya. En estos años la ciudad se transformó en una urbe europea con la construcción de numerosos edificios para la administración pública. Algunos de los más emblemáticos son el Palacio del Gobernador general, la Oficina de Correos, el Teatro de la Ópera, el Museo de Historia de Vietnam o el hotel Sofitel Legend Metropole.

Qué ver en Hanoi

Templo de Quán Thánh Đền Quán Thánh

Comenzamos el día visitando este templo taoísta de la dinastía Ly (1.010 – 1.225). Está protegido por árboles frondosos y está dedicado a Huyen Thien Tran Vu, dios que simboliza la Estrella Polar, que gobierna el Norte y gestiona las tribus del agua en las creencias taoístas, también conocido como El Emperador del Norte. Sus símbolos son la tortuga y la serpiente.

Está situado donde cruzan las calles Thanh Nien y Quan Thanh, muy cerca del lago West y el lago Truc Bach.

El templo lo construyó el rey Ly Thai To el año 1.010 y ha tenido varias restauraciones en los siglos XVII y XIX. Los principales tesoros del templo son la estatua del dios Huyen Thien y la campana, ambas hechas en 1.677 con el raro bronce negro. La estatua mide 4 m de altura y pesa 4 toneladas. La campana tiene 1’5 metros de altura y pesa 1 tonelada.

Nos resultó muy agradable la forma cómo nuestra primera y excepcional guía llamada Hang (Luna), nos fue mostrando y explicando no solo los edificios, sino la forma de pensar y sentir general del pueblo vietnamita.

Uno de los aspectos más importantes para ellos es la religiosidad, entendida como una filosofía de vida más que como dogmas de fe. Estas dos frases que nos dijo reflejan muy bien el carácter y la educación que las familias transmiten a sus hijos: «Una sonrisa que das te devolverá todo un día de buena suerte». «Un perdón que ofreces significa nueve cosas buenas para ti«.

En el templo de Quan Thanh tuvimos nuestra primera visión de los altares repletos de ofrendas de comida y bebida y algo que para nosotros puede resultar muy extraño, enseguida cobró sentido cuando nuestra guía, Luna nos lo explicó. Todos estos alimentos son ofrenda y alimento espiritual para los dioses o para los antepasados, pero a la vez sirven de sustento tanto para los monjes como para los necesitados de la ciudad. Allí nada se tira ni se desperdicia. Los templos constituyen un servicio social imprescindible canalizando la solidaridad de los ciudadanos.

Allí nos explicó la costumbre de los vietnamitas de quemar dinero para que les llegue a un familiar o un amigo difunto. Así podrán “comprarse” cosas en el más allá y también disfrutar de las cosas que le gustaban, como un buen whisky o una lata de Coca Cola… pero no te equivoques… el dinero no es el que utilizamos los vivos, ese dinero se compra en las tiendas. No es dinero falso, es dinero bueno, pero del «Banco de los Muertos» y solo les sirve a ellos. Nos gustó mucho tener la oportunidad de realizar esta tradición quemando los billetes que Luna nos repartió a cada uno para nuestros antepasados.

También resulta muy interesante saber que en Hanoi hay 4 templos taoístas y están situados en los cuatro puntos cardinales. Son el llamado Cuarteto Sagrado de Thang Long, los dioses Long Do, Linh Lang, el emperador Cao Son y Tran Vuy protegen la ciudad no solo de los demonios sino también de los invasores.

  • Al Norte está este templo de Quan Thanh que hemos visitado.
  • Al Sur, el de Kim Lien.
  • Al Este, el templo de Bach Ma.
  • Al Oeste, el de Thu Le.

Pagoda del Pilar Único

Este hermoso edificio de madera está situado entre el mausoleo y el museo de Ho Chi Minh. Lo construyó el emperador Ly Thai Tong en 1.049. Su diseño sobre una sola columna quiere representar el símbolo de la pureza, una loto en flor que surge sobre un mar de sufrimiento. En 1.954 los franceses, antes de abandonar el país destruyeron totalmente el edificio, sin embargo el gobierno la reconstruyó.

Pagoda Trang Quoc

Llegamos a la pagoda de Quang Troc, el principal centro budista de Hanoi, con sus 11 pisos.

Es la pagoda más antigua de la ciudad. Tiene más de 1.500 años pues la construyeron entre los años 541 y 545.

Al principio su nombre era el de Khai Quoc (Fundador Nacional). Sin embargo, en el siglo XVII el Emperador Le Kinh Tong decidió cambiarla de lugar por el peligro de las inundaciones al lado del río Rojo y le cambió el nombre por el actual de Trang Quoc (defensa nacional).

Su arquitectura responde al estilo y a la simbología budista. Tiene 11 pisos que corresponden a cada uno de los 11 estados por los que el budista tiene que pasar antes de alcanzar la iluminación.

Cada piso tiene 6 puertas y cada una de ellas la preside una estatua de Amitabha, el buda más importante de la escuela de la Tierra Pura.

Nuestra guía Luna, nos habla de la importancia de ir a los templos a pedir por la salud, ya que la Sanidad es privada y la mayoría de la gente no puede pagarla. Así que tienen canciones para tranquilizarse y de esa forma no sufrir un ataque al corazón, por ejemplo, porque además, todo se paga por adelantado, si no puedes pagar el dinero, no te tratan el ataque.

Las Pagodas funcionan como centros de asistencia para gente necesitada. La gente deposita ofrendas para ellos y también para sus antepasados, pero cada 15 días, se retiran esas ofrendas y se reparten entre los necesitados. Pueden ser cestos de fruta con dinero intercalado entre ellas, o torres de agua embotellada, o coca colas con dragones dorados, chocolate… Normalmente no se deja carne o pescado, porque los monjes que reparten los paquetes de comida son vegetarianos.

También se tiene en cuenta si a esa Pagoda acuden a recoger ayuda más gente mayor o más niños… Entonces dejarían el tipo de comida que necesita uno u otro.

Lago del Oeste, Highland Coffee

En el Lago Tay encontramos un café muy grande llamado Highland Coffee. Un poco más allá hay un monumento erigido al ultimo de los soldados norteamericanos capturado en la guerra. Este hombre que quiso resarcir el daño que había causado a los vietnamitas, volvió aquí y se dedicó a hacer el bien. Poco a poco vamos entendiendo de forma más completa el valor de este pueblo que ha sufrido tanto y que sin embargo no guarda rencor y es capaz de levantar un monumento a un piloto estadounidense que se dedicó a bombardear su país.

Pagoda de los Embajadores

Es el centro oficial del budismo en Hanoi. Se llama así porque en el siglo XVII era el lugar donde se hospedaban los embajadores de países budistas.

Actualmente la ocupan monjes y monjas budistas y tiene una tienda para la venta de todo lo relacionado con el budismo.

Templo de la Literatura

La diferencia entre un Templo y una Pagoda es que el primero está dedicado a Buda y el segundo a personajes históricos.

El Templo de la Literatura es un bonito ejemplo de la arquitectura tradicional vietnamita y un lugar para relajarse y descansar del ajetreo de las calles de Hanoi. Lo fundó el emperador Thai Tong en 1.070, dedicado a Confucio para honrar a los sabios y a los hombres de letras.

Ya desde su fundación acogió la primera universidad para formar a los hijos de mandarines. Las estelas que hay se colocaron a partir de 1.484 y registran los logros, lugares de nacimiento y nombres de los doctorados en cada examen trienal. La universidad la trasladó a Hué el emperador Gia Long.

Los cinco patios con los que cuenta estaban muy organizados. Los caminos del centro y sus puertas correspondientes estaban reservadas al rey. Los senderos de un lado eran para los mandarines administrativos y los del otro lado para los mandarines militares.

En los tejados se distinguen esculturas de animales, cada uno con su simbolismo propio. La carpa representa a los estudiantes, la tortuga simboliza la larga vida

Un cartel en la puerta anterior a la principal indica a los visitantes que bajen del caballo antes de entrar.

Es muy interesante el pabellón Khué Van, construido en 1.802. Conserva 82 estelas que están consideradas los objetos más preciados del templo. Cada estela se apoya en una tortuga de piedra.

Como el negocio es el negocio, al patio de Thai Hoc está repleto de tenderetes y puestos de venta para turistas. Como siempre en Vietnam, es aconsejable regatear, y aquí más, pues los guías indican que los precios suelen estar más inflados.

Mausoleo de Ho Chi Min

Después de comer fuimos al mausoleo de Ho Chi Min.

Se inauguró en 1.975 y está situado en la zona oeste del barrio antiguo. Es una zona peatonal con parques, jardines y pagodas llena de gente local y turistas a cualquier hora del día. Muchos vietnamitas lo consideran el lugar más sagrado del país, por lo que en su visita hay que guardar estrictas normas de comportamiento y vestimenta y no se permiten fotografías ni vídeos. También está prohibido fumar o comer chicle en todo el recinto (también en los jardines), pero no se limitan a vigilar que no se haga, simplemente requisan esos productos en el escáner de la entrada. Resulta curioso ver el montón de paquetes de tabaco y chicles detectados.

En este enorme recinto de más de 20 hectáreas, los principales puntos de interés son:

  • El edificio del Mausoleo, un bloque de granito enorme típico de la arquitectura soviética donde se custodia en una urna de cristal el cuerpo embalsamado del líder de la nación, el tío Ho, como le llaman cariñosamente los vietnamitas. Este es el lugar donde Ho Chi Minh declaró la independencia de Vietnam en 1.945.
  • El palacio francés. Está justo al lado del mausoleo y contrasta por su estilo colonial francés y un llamativo color amarillo. Allí residía el Gobernador de Indochina. Se construyó en 1.906 y no se puede visitar. Se utiliza para recepciones oficiales
  • La casa de Ho Chi Minh, una vivienda de madera donde el tío Ho pasó algunas temporadas desde 1.958 a 1.969. De orígenes humildes, siempre creyó que debía predicar con el ejemplo manteniendo un tipo de vida austero, aunque el edificio viene a ser una versión lujosa de la vivienda tradicional de la etnia que le acogió.
  • El jardín que rodea estos edificios es enorme, con una gran variedad de plantas y amplias avenidas.

Templo de Hai Ba Trung

Data de 1.142 y está dedicado a las hermanas Trung (siglo I d. C.) que se proclamaron reinas y lucharon por la independencia de Vietnam. Tiene una estatua que representa a las dos hermanas arrodilladas con los brazos levantados. Algunos dicen que muestra el momento en el que van a arrojarse al río para morir ahogadas antes de caer en manos de los invasores chinos.

Pagoda de Tay Ho

Dicen que es el lugar de culto más popular en Hanoi porque los días 1 y 15 de cada mes lunar allí se obtiene la buena suerte. Mucha gente, sobre todo los solteros vienen aquí en masa esos días. El templo está dedicado a Thánh Mẫu, la diosa Madre. Según la leyenda, en el siglo XVII, una hermosa joven se apareció a un pescador junto al lago sonriendo y recitando poemas y después desapareció. Aunque no reveló su identidad, las gentes del lugar pronto comprendieron que se trataba de la diosa y decidieron construir el templo en su honor.

El templo tuvo una gran remodelación en 1.999, pero aún se conservan edificios de la época anterior como la Puerta de Tres Hojas, la Casa para los Antepasados y la Casa del Huésped.

El callejón de entrada está lleno de tenderetes que venden ofrendas al templo y comida y también hay restaurantes de marisco fresco a la orilla del lago. Se dice que es el mejor lugar para probar los platos locales entre otros, el famosísimo Bánh tôm o pan frito con gambas.

Es un lugar siempre alegre y lleno de animación.

Cómo llegar a la pagoda de Tay Ho

Lo más fácil es salir desde la plaza Ba Dinh y dirigirse al norte por la calle Hung Vuong para alcanzar el lago West. Siguiendo el camino a la sombra de los árboles, atravesaremos la zona de la villa Tây Hồ y llegaremos a la pagoda. Esta se alza en una península con forma de pez que se adentra en el lago. Comprobaremos si es cierto que la zona está maravillosamente impregnada por el aroma de las flores de loto.

Barrio antiguo

Las calles de Hanoi

En la parte vieja de Hanoi había unas treinta y tantas calles donde se agrupaban los comercios por tipos. Aún quedan algunas donde se puede ver esto, como la calle de las plantas, la calle de las tiendas de comida, la calle de las zapaterías…

Se vive en las aceras, que comparte el peatón con los negocios, las motos aparcadas, las mini sillitas de los bares… y casi siempre, es el peatón el que no cabe y tienen que caminar por la carretera junto a la locura de tráfico.

Luna nos ha llevado a comer a un sencillo restaurante lleno de gente del lugar y algunos turistas. La comida era sencilla, estaba buena aunque la limpieza brillaba por su ausencia.

Toda la parte vieja de Hanoi está muy sucia, la basura se acumula en las aceras, las paredes parecen mugrientas y las mesas están pegajosas… más no queremos deducir… baños, cocinas.

Nuestro menú llevaba la típica sopa con fideos de arroz

El barrio antiguo es el corazón histórico de Hanoi. Las calles son estrechas y están abarrotadas de gente. Cruzarlas es todo un arte. Este barrio se extiende junto al río Rojo y al otro más pequeño, el To Lich que antiguamente atravesaba el centro de la ciudad.

Los 36 gremios de la ciudad se asentaron aquí ya en el siglo XIII, cada uno en una calle diferente. Casi siempre el nombre hace referencia a la mercancía (Phang) que se vendía allí. Así, por ejemplo la calle Pho Hang Gai es la calle de la seda donde se pueden comprar objetos lacados, sedas, pinturas, marionetas, sacos de dormir de seda o el elegante ao dai, el vestido tradicional vietnamita.

Es muy característica la estrechez de las casas (casas tubo) porque los impuestos se pagaban en relación con la amplitud de la fachada. Siempre limitaban la altura a dos pisos porque las casas no podían superar al palacio real.

Ruta a pie por Hanoi

Ruta a pie por el barrio antiguo

La ruta comienza en el Templo de Ngoc, al norte del lago Hoam Kiem y volver cruzando el puente Huc, de ladrillo rojo. Allí se encuentra el Monumento a los Mártires.

Sigue hacia el norte por Pho Hang Dau donde venden calzado.

Cruzando Pho Cau Go, llegarás a Pho Hang Be (balsas) para recorrer el mercado en Pho Gia Ngu. Vuelve a Pho Hang Be y sigue hacia el norte hasta el cruce con Pho Hang Bac. Muy cerca hay muchos artesanos de lápidas de piedra. La próxima parada será la Casa-Monumento conmemorativa. Es la casa de un comerciante chino restaurada como museo en 1999 en colaboración con la ciudad de Toulouse. Tiene muy poca decoración, pero es preciosa y refleja muy bien el modo de vida de los antiguos comerciantes del barrio.

Volviendo a Pho Hang Bac, en dirección oeste hay muchas joyerías. La pequeña casa del número 102, esconde un bonito templo donde es posible descansar un ratito.

Saliendo, gira hacia la derecha por Pho Hang Ngang donde hay varias tiendas de ropa para volver a girar a la derecha por Pho Hang Buom para ver el pequeño templo de Bach Ma, el más antiguo de Hanoi. Fue construido por Ly Thai To para honrar al caballo que, según la leyenda, le guió hasta el lugar donde había de construirse la muralla de la ciudad. En el templo veremos la estatua del caballo y un bonito palanquín funerario lacado en rojo. Fijarse también en los guardas con barbas blancas que se pasan el día bebiendo té.

Seguimos hasta Pho Hang Chieu para ver la antigua Puerta del Este, Cua O Quan Chuong, un resto muy bien conservado de la muralla.

Dirección norte por la estrecha Pho Thanh Ha alcanzamos el bullicioso mercado callejero de alimentos. Un poco más adelante, girando hacia la izquierda hay otro enorme mercado, el mercado de Don Xuan, uno de los más grandes de la ciudad.

Desde aquí, volveremos por Nguyen Thien Thuat para girar a la derecha por Pho Hang Chieu. En la calle Pho Hang Ma (calle de la imitación) veremos tiendas de objetos de paja y cuerda. También venden «dinero espiritual» de imitación que es el que queman en las ceremonias budistas.

Continuamos la ruta girando dos veces a la izquierda, en la esquina de Pho Lo Ren y Pho Thuoc Bac se encuentran los herreros trabajando el metal.

Siguiendo hacia el sur por Pho Thuoc Bac, giraremos por la calle Pho Lan Ong donde veremos muchas tiendas de herbolarios. Al final de la calle, un merecido descanso en el café Baguette et Chocolat.

Una vez en Pho Thuoc Bac, volveremos sobre nuestros pasos y tomar dirección sur para ver a los artesanos de cajas de estaño enfrente de las tiendas de espejos en Pho Hang Thiec y luego girar a la izquierda para ver las tiendas de altares y estatuas budistas en Pho Hang Quat.

Desde aquí nos dirigimos a Pho Hang Gai para admirar las exquisitas tiendas de seda.

Muy cerca, hacia el sur se alza la catedral neogótica de San José. A unos pasos, en la calle Pho Nha Tho hay elegantes cafés y restaurantes.

Unas calles más allá, en Pho Hang Hang son bares y restaurantes vietnamitas, más locales.

La calle que llaman del ferrocarril es la calle Phung Hung, que ahora tiene su acceso limitado, sobre todo a las horas en las que pasa el tren.

Templo de Ngoc Son

Del siglo XVIII, se sitúa en una isla al norte del lago Hoam Kiem. Es un lugar tranquilo y agradable, rodeado de agua y bajo la sombra de abundantes árboles.

Está dedicado a un erudito, Van Xuon, a un militar Tran Hung Dao que derrotó a los mongoles en el siglo XIII y al patrón de los médicos, La To.

Muy cerca se levanta el Monumento a los Mártires, los caídos por la independencia de Vietnam.

Marionetas sobre el agua

El espectáculo de las marionetas de agua nos resultó realmente encantador. Aunque llegamos un pelín tarde con la representación ya empezada, teníamos los asientos reservados en primera fila, por lo que pudimos disfrutar hasta del agua que a veces nos salpicaba por el entusiasmo con que los actores la golpeaban.

El roi nuoc es un espectáculo singular en el que las marionetas se manejan en un estanque con el agua que llega casi hasta la cintura de los actores. Estos se encuentran escondidos tras unos estores y manejan los muñecos con unos largos palos por debajo del agua. Las marionetas son de madera lacada de brillantes colores y realmente atrapan al espectador que. Aunque los diálogos son en vietnamita, la música y la acción desarrollan una comunicación perfecta y todo el mundo entiende perfectamente la trama. Cuentan historias de la vida cotidiana, los niños divirtiéndose en el agua, la siembra del arroz, una pareja de campesinos que tienen que proteger a sus patos del ataque del zorro…

Su origen es muy antiguo y evidentemente refleja la costumbre de actuar directamente en los arrozales ya desde el siglo XI con la finalidad de entretener al público, pero también la de distraer a los espíritus.

Café vietnamita con huevo

Nuestra primera impresión por desconocer totalmente el producto, fue el de hacer una mueca de desagrado al oír el nombre. Todo lo contrario. Nos llevaron a un café donde lo prepararon delante de nosotros y realmente está exquisito. Nos encantó.