Ruta por Portugal: Día 4: Lisboa 3
Qué visitar en Lisboa: Ruta 3, por la tarde: Praça do Comércio —> Metro. Cais do Sodre —> Metro Picoas —> Parque Eduardo VII —> Praça Marquês de Pombal —> Av da Liberdade —> Praça dos Restauradores —> Plaza Rossio —> Elevador de Santa Justa.
Después de comer paseamos por la Plaza del Comercio, tomamos el metro en Cais do Sodre y nos bajaremos en la otra punta de Lisboa en la parada modernista de Picoas… no te pierdas el paseo fotográfico —>
Paseando por Lisboa 3
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Qué visitar en Lisboa: Ruta 3
Plaza del Comercio
Antes del terremoto se llamaba Terreiro do Paço, Terrado del Palacio, porque aquí estuvo el Palacio Real durante más de 200 años. Los reyes solían vivir en el Castillo de San Jorge, pero en la Era de los Descubrimientos Lisboa se convirtió en una importante ciudad portuaria y allá por el s. XVI, construyeron aquí su palacio.
La Praça do Comércio tiene forma de U, con su lado abierto mirando al Tajo. Aquí llegaban los barcos y era la puerta de Lisboa. El arco triunfal es el inicio de la calle Augusta, la entrada a La Baixa.
La Rua Augusta une el Arco Triunfal de la plaza, con la importante Plaza del Rossio. En medio de la plaza está la estatua del rey D. José I, que nada más subir al trono dejó el poder en manos de su primer ministro, conocido como el Marqués de Pombal, que reconstruyó Portugal después del gran terremoto de 1755, de una intensidad estimada en 9 puntos en la escala de Richter.
Metro Cais do Sodre
En esta estación, queríamos hacerle una foto al conejo blanco de Alicia en el País de las Maravillas, «Llego tarde, llego tarde…», me encanta, y ahora nos bajaremos en la otra punta de Lisboa en la parada modernista de Picoas.
Parada modernista de Picoas
Este tipo de acceso fue creado a principios de siglo XX por Hector Guimard, un artista Art Nouveau, para decorar las entradas del Metropolitano de París.
Esta pieza de mobiliario urbano es conocida como ‘acceso Guimard’ y fue regalada por el Metropolitano de París.
Parque Eduardo VII de Inglaterra
Un parque amplio y con bellas vistas. Fue bautizado en honor al rey Eduardo VII del Reino Unido que visitó Lisboa en 1902 para reafirmar la alianza entre los dos países. Dentro del parque está la Estufa Fría, un jardín botánico con numerosas plantas exóticas, riachuelos, cascadas… y que posee también la Estufa Quente (caliente) con plantas y animales de clima tropical y la Estufa Doce (dulce).
Estamos en el ‘Monumento al 25 de abril’, en la foto se ven las sombras de las columnas, y que está dedicado al día de la Revolución de los claveles, donde acabaron con la dictadura.
El Marqués de Pombal en su juventud estudió derecho en la Universidad de Coímbra y luego inició la carrera diplomática con gran inteligencia y agudeza. Después del terremoto, el Marqués de Pombal empezó a reconstruir la ciudad, de acuerdo con la famosa frase: «¿Y ahora? Se entierra a los muertos y se da de comer a los vivos». Antes de que pasara un año Lisboa estaba reconstruida. Un personaje controvertido que ejercía el despotismo ilustrado, ‘todo para el pueblo pero sin el pueblo’, modernizó Portugal y sus investigaciones sobre el terremoto de Lisboa marcaron el nacimiento de la sismología como ciencia.
Praça dos Restauradores
La plaza tiene un gran obelisco que conmemora la independencia de Portugal frente a España en 1640, después de 60 años en que permanecieron unidas.
Praça del Rossio
Es la Praça de Dom Pedro IV, más conocida como ‘del Rossio’ y que ha sido centro neurálgico de la Baixa, la parte baja y llana de la ciudad, desde la Edad Media. Esta plaza del Rossio estuvo rodeada de importantes edificios y palacios y entre ellos el más importante, el Hospital Real de Todos los Santos, terminado en 1504 por Manuel I, ocupaba todo un lateral de la plaza. Todos ellos se destruyeron en el terremoto, los actuales son del siglo XVIII.
En el hueco que quedó donde estaba el Hospital, se transformó con el tiempo en la Plaza de Figueira, que está al lado. La vimos esta mañana y ahora con la luz del atardecer, el Castillo está precioso.
Elevador de Santa Justa
Cerca del Rossio, está el Elevador de Santa Justa, de 1900-1902, es el único elevador público vertical, ya que el Elevador da Glória, el da Bica y el do Lavra son en realidad funiculares o pequeños tranvías. Es de estilo neogótico con filigranas.
Hemos desistido de subir, las colas son tremendas, y no queremos perder tanto tiempo. Nos damos por satisfechos con las vistas desde el Castillo.
Vista desde el Castillo de San Jorge, desde aquí se domina toda Lisboa. Cerca de la lancha que maniobra en el Tajo, se puede apreciar el gran rectángulo de la Plaza del Comercio. Y hasta este castillo llegó Vasco Nuñez de Balboa para decir que había hecho el viaje hasta las Indias y había vuelto, con lo cual había realizado el viaje más largo que dar la vuelta al mundo por el ecuador y más largo de los que jamás se habían realizado hasta entonces. Es una visita imperdible y cuanto más temprano vayas, mejor.