Olmedo • prov.Valladolid • España
A menos de 50km. de Valladolid, Olmedo es otro de los pueblos que elegimos en nuestra ruta por estas tierras, con la ilusión de ver el lugar donde Lope de Vega imaginó su famosa tragicomedia, «El Caballero de Olmedo» con su triste desenlace por la muerte de Don Alonso, amado por Doña Inés.
Es un dicho conocido de la ciudad, desde su expansión medieval y por la extensión a la que llegó en el siglo XVII, se le denominaba la «Villa de los Sietes», pues poseía siete pueblos de su alfoz, siete arcos o puertas de entrada, siete iglesias, siete conventos, siete plazas, siete fuentes y siete casas nobles.
Y otro viejo dicho que nos habla de la importancia de la villa es «Quien señor de Castilla quiere ser a Olmedo de su parte ha de tener».
Su nombre dicen que proviene de la abundancia de Olmos que tenía, lamentablemente casi extinguidos por la grafiosis.
Qué ver en Olmedo
Iglesia de Santa María del Castillo
Está situada en la plaza de Santa María. Allí dejamos aparcado el coche y comenzamos a pasear esta bella ciudad. Este templo gótico del siglo XVI se construyó en diferentes periodos históricos y conserva los restos de una bella portada románica del siglo XII. Frente a esta puerta y cobijados por los soportales de esta iglesia principal, se reunían los Procuradores Sexmeros, como era la costumbre en las villas de Castilla. Estos Sexmeros eran los representantes elegidos por las aldeas de cada Sexma en las reuniones del Concejo en la Villa.
Dentro de la iglesia, hay un valioso retablo del XVI y es muy curioso el enorme relicario, también del XVI, con los bustos de 49 santos y sus reliquias.
Antiguo convento de la Merced
Frente a la iglesia de Santa María, en la misma plaza, el antiguo convento de la Merced, del siglo XVIII. Los frailes mercedarios o de la Merced, se dedicaban a rescatar cautivos cristianos prisioneros, generalmente del islam. Por eso en las bóvedas de la iglesia aparecen como decoración las cadenas, recuerdo de los prisioneros liberados.
Hoy todo el edificio ha sido completamente restaurado y funciona como Centro de Artes Escénicas y lleva adelante una dinámica actividad de representaciones y espectáculos, sobretodo de teatro clásico.
Plaza Mayor
A muy poca distancia encontramos la preciosa plaza Mayor porticada. En el centro del jardín que hay en la plaza, vemos en el suelo el escudo de la villa y al fondo, el Ayuntamiento. Bajo sus arcos se abre el Arco del Corregidor.
En el extremo opuesto, prácticamente ya fuera de la plaza, está la Casa del Reloj que era la antigua cárcel, del siglo XV. El reloj que todavía hoy se conserva en la fachada es de 1.889.
El edificio de al lado era la Real Chancillería o Sala de Justicia. Hoy funciona como biblioteca y sala de exposiciones.
Palacio Caballero de Olmedo
Sin más pasear nos dirigimos a ver el Palacio del Caballero de Olmedo, un museo audiovisual con imágenes, luces y voces que te envuelven en la literatura del Siglo de Oro y también escenifican la historia del caballero. Que de noche le mataron al Caballero, la gala de Medina, la flor de Olmedo.
En realidad es la casa natal de Gerónimo de Alderete y Mercado, nacido en Olmedo en 1518 que falleció en Panamá en 1556. Fue gobernador de Chile, adelantado, explorador, conquistador y perteneció a la orden de Santiago. Participó en la conquista de Venezuela, Perú y Chile.
Luchó en Perú contra la sublevación de los hermanos Pizarro en 1548 a quienes derrotó, defendiendo a los nativos que los Pizarro querían esclavizar. Destacó en la batalla de Fuerte Penco (Chile 1550) donde lideró estoicamente la defensa del fuerte a pesar de la descomunal inferioridad numérica con la que contaba en la batalla. Fundó la ciudad de Villarrica en 1552 a las órdenes de Pedro de Valdivia, en una época en la que los españoles fundaron importantes universidades y hospitales.
Gastronomía en Olmedo
No solo de literatura vive el hombre, así que hicimos un alto para comer algo también clásico… un cocido.
Murallas de Olmedo
Después de comer paseamos alrededor de las murallas, que son del siglo XIII-XIV. Olmedo es una villa mudéjar que conserva una tercera parte de su amurallado medieval.
La repoblación del sur del Duero dio lugar a una organización territorial y defensiva a través de las Comunidades de Villa y Tierra. Esta peculiar organización trajo consigo en amurallamiento de las villas de cabecera, como era el caso de Olmedo, con siete u ocho puertas, de las que se conserva el arco de San Miguel y la Puerta de la Villa.
El estilo constructivo de las murallas sigue el esquema del mudéjar Toledano, las cajas de mampostería se separan por hiladas de ladrillo, material que también es usado en los ángulos y en los arcos de entrada a la ciudad. Seguimos recorriendo la muralla por el Paseo de la Soterraña y viendo los nidos de cigüeñas sobre las cajas de mampostería, hasta llegar a la iglesia de San Miguel.
Iglesia de San Miguel
Siglos XIII-XVIII. Templo mudéjar del siglo XIII situado junto al Arco de San Miguel. De ladrillo y mampostería es uno de los mejores edificios del estilo en la provincia. En su interior está la cripta santuario de Nuestra Señora de la Soterraña, patrona de Olmedo y su comarca, en ella se venera la imagen de la virgen de la Soterraña de 1300. Tiene forma octogonal de ladrillo con cúpula decorada con pinturas y yeserías y tribuna alrededor.
El arco de San Miguel, denominado así por estar situado junto a la iglesia mudéjar se flanquea por gruesa muralla de mampostería y hormigón, de estilo típicamente mudéjar con cubos rectos sobresaliendo del recinto amurallado.
Puerta de la Villa
Seguimos recorriendo la muralla por fuera hasta llegar a la Puerta de la Villa, denominada así por situarse el lugar principal, se dispone en doble arco de medio punto de ladrillo, con motivos de dientes de sierra en el interior. Flanqueada por gruesos cubos semicirculares y muros de mampostería y hormigón, de estilo típicamente mudéjar.
Iglesia de San Andrés
Nos dirigimos a la Plaza de San Andrés donde encontramos «La Olma»… lo que queda de estos majestuosos árboles que tan buena sombra dieron a nuestros antepasados y tan buenas charlas ampararon. Aquejados de una enfermedad invasora desde principios del siglo XIX, aún no se ha conseguido salvar la especie.
Detrás vemos la iglesia de San Andrés, templo de una sola nave construido en el siglo XIII por mudéjares, que conserva de entre sus ruinas solamente un bello ábside románico mudéjar de ladrillo, la portada de medio punto en el lado del Evangelio y la torre de dos cuerpos, reformada en el siglo XVII, construida en ladrillo y hormigón.
Siguiendo por la calle del Arco del Corregidor, volvemos a salir a la Plaza Mayor con su arcada, la Casa del Reloj al fondo… vamos a coger el coche y acercarnos hasta el parque mudéjar.
Parque Temático del Mudéjar de Castilla y León
Nos hubiera gustado verlo, pero no nos queda más tiempo y ya está cerrado. Tiene reproducciones grandes de castillos e iglesias de la provincia.
Fuente del Caño Nuevo y antiguo lavadero
Este antiguo lavadero es uno de los pocos ejemplares que aún perviven en la provincia de Valladolid. Tiene dos grandes pilas, una de aclarado y otra de lavado. El suministro de agua lo recibe de la contigua Fuente del Caño Nuevo. En la zona de lavado tiene unos pequeños resaltes que permitían que las lavanderas se pudieran arrodillar, y pudieran colocar con mayor facilidad el tajo, madera que en una de sus caras lleva talladas una ranuras y que servía para restregar sobre ella la ropa al enjabonarla. Cuando se terminaba el proceso de lavado se pasaba la pila del aclarado que recibe el agua del manantial y que arrastraba los restos de jabón para que cayese en la pila de lavado. Por último el agua sobrante caía un estanque donde se almacenaba para el posterior riego de la zona de huertas, próxima a este espacio.
Antiguo Monasterio de la Concepción
Fue fundado en 1516 gracias al patrocinio de Alonso Patiño y su esposa Teresa Velázquez, cuyos escudos aparecen en el pórtico exterior junto a tres esculturas en piedra dan paso a la iglesia. Actualmente es Sede del museo local de Semana Santa.
Paseando por Olmedo
