La región de Shirakawa, en el valle del río Shogawa, alberga pueblecitos que han conservado su aspecto antiguo de la época Edo. Uno de los pueblos más famosos de la zona Shirakawa go es Ogimachi, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Sus famosas casas con tejados cubiertos de paja y una fuerte inclinación de 60 grados a dos vertientes están diseñadas para resistir las grandes nevadas del invierno. Se llaman gassho zukuri y significa: «construido como las manos en una oración» porque los tejados recuerdan la posición de las manos de los monjes cuando rezan. Muchas eran granjas en las que vivían familias de más de veinte personas y tenían varios pisos para acoger vivienda y lugar de trabajo. La planta superior solían dedicarla a la cría del gusano de seda, lo cual reportaba importantes ingresos a la familia.
Muchas de estas construcciones tienen más de dos siglos de antigüedad. Aún hay algunas usadas como viviendas, pero la mayoría son museos, restaurantes o las típicas posadas llamadas ryokan.
Es una de las zonas más visitadas de Japón, especialmente en invierno cuando la nieve lo cubre todo, lo que unido a la iluminación de las viviendas, dan al paisaje un aspecto mágico.
Nos detuvimos en la Casa Wada, uno de los ejemplos más destacados de la arquitectura Gassho zukuri.