Esta interesantísima visita guiada nos condujo a lo alto de la Torre dell’Orologio desde donde se puede contemplar una imagen sorprendente de la Basílica, la plaza y las altanas o pequeñas azoteas que se construyen los venecianos en sus casas para disfrutar de la luz y del sol. Resultó un momento encantador gracias también al buen hacer y la amabilidad de las guías.